Entendiendo la escoliosis: un vistazo detallado

La escoliosis, una desviación lateral de la columna vertebral, es un fenómeno que, en su mayoría, se manifiesta durante la adolescencia. En Clínica Osten, somos referentes en Sevilla en el diagnóstico y tratamiento de escoliosis. Aunque puede presentarse en conjunción con condiciones como la parálisis cerebral infantil y la distrofia muscular, en muchos casos, la causa subyacente permanece desconocida.

Casos leves de escoliosis 

A pesar de que la mayoría de los casos de escoliosis son leves, algunas desviaciones se intensifican con el crecimiento, convirtiéndose en una preocupación seria. Las curvaturas severas pueden afectar la capacidad pulmonar al reducir el espacio dentro del pecho.

Diagnóstico y evaluación de la escoliosis

La detección temprana, especialmente mediante radiografías, es crucial para los casos leves. En muchos de ellos, no se requiere tratamiento. Algunos niños pueden necesitar aparatos ortopédicos para frenar la progresión de la curvatura, mientras que otros pueden requerir cirugía para corregir curvas más pronunciadas.

Reconociendo la escoliosis

Los síntomas de la escoliosis incluyen desigualdades notables en los hombros, omóplatos, cintura y caja torácica. La rotación o torsión adicional de la columna vertebral contribuye a la prominencia asimétrica de costillas y músculos.

¿Cuándo consultar con un médico?

Si observas señales de escoliosis en tu hijo, como hombros desiguales, consulta a un profesional de la salud. Las curvaturas leves pueden desarrollarse sin causar dolor aparente y, a menudo, son notadas por maestros, amigos o compañeros deportivos.

Explorando las causas de la escoliosis

La causa principal de la escoliosis comúnmente diagnosticada es desconocida, aunque la influencia genética parece ser un factor. Otros tipos menos frecuentes pueden relacionarse con condiciones neuromusculares, defectos de nacimiento, cirugías tempranas en la pared torácica, lesiones o infecciones en la columna e irregularidades en la médula espinal.

Factores de riesgo de la escoliosis

Edad: Los signos comienzan típicamente en la adolescencia.

Sexo: Aunque ambos géneros pueden experimentar escoliosis leve en la misma proporción, las niñas tienen un mayor riesgo de progresión.

Antecedentes familiares: Aunque puede tener un componente hereditario, muchos casos no tienen antecedentes familiares de la enfermedad.

Complicaciones potenciales

A pesar de que la mayoría de las personas con escoliosis tienen formas leves del trastorno, algunas complicaciones pueden surgir, como:

Problemas respiratorios: en casos severos, la caja torácica puede presionar los pulmones, dificultando la respiración.

Problemas de espalda: Las personas con escoliosis en la infancia pueden tener más probabilidades de sufrir dolor crónico en la edad adulta, especialmente si las curvas no se tratan adecuadamente.

Impacto en el aspecto: A medida que la escoliosis avanza, los cambios visuales pueden volverse más evidentes, afectando la simetría de caderas y hombros, provocando costillas prominentes y desplazando la cintura y el tronco lateralmente. Esta alteración estética puede generar inseguridades en quienes la experimentan.

En Clínica Osten entendemos que la escoliosis es un fenómeno complejo que merece atención y cuidado. La detección temprana y el manejo adecuado, ya sea mediante la observación, el uso de aparatos ortopédicos o la intervención quirúrgica en casos severos, pueden marcar la diferencia en el bienestar a largo plazo de quienes la experimentan. Si sospechas de escoliosis en tu hijo o en ti mismo, no dudes en buscar la orientación de nuestros profesionales de la salud para proporcionar evaluaciones y recomendaciones específicas según tu situación.