Esguince de Rodilla: Causas, Síntomas y Tratamientos

En esta ocasión en Clínica Osten vamos a tratar una lesión muy común entre nuestros pacientes, el esguince de rodilla. Esta lesión puede afectar a personas de todas las edades y con cualquier nivel de actividad física. Ocurre cuando uno o más de los ligamentos que sostienen la rodilla se estiran o se desgarran debido a una torsión o una fuerza brusca en la articulación. Los ligamentos son bandas resistentes de tejido que conectan los huesos y son esenciales para mantener la estabilidad de la rodilla. En este artículo, explicaremos las causas, síntomas y opciones de tratamiento para el esguince de rodilla.

Los esguinces de rodilla se pueden clasificar según su gravedad:  

Esguince de Rodilla de Grado I (leve): En este caso, el ligamento se estira, pero no se desgarra por completo. Los síntomas suelen incluir dolor leve, hinchazón y una cierta sensación de inestabilidad en la rodilla. A menudo, las personas con un esguince de grado I pueden seguir caminando y realizando actividades con cierta incomodidad.

Esguince de Rodilla de Grado II (moderado): En esta categoría, el ligamento se estira significativamente y puede sufrir un desgarro parcial. Los síntomas se intensifican, con hinchazón, dolor agudo, dificultad para doblar la rodilla y una sensación de inestabilidad más notable. En algunos casos, el paciente puede requerir muletas para caminar.

Esguince de Rodilla de Grado III (grave): Este es el tipo más severo de esguince de rodilla, en el que el ligamento se desgarra por completo. Los síntomas son más intensos y pueden incluir un dolor agudo, hinchazón significativa, incapacidad para doblar la rodilla y una sensación clara de inestabilidad. En la mayoría de los casos, las personas con un esguince de grado III no pueden soportar peso en la pierna afectada y requieren asistencia para caminar.

Los esguinces de rodilla pueden afectar uno o varios ligamentos al mismo tiempo, lo que puede complicar aún más la lesión. Los ligamentos que suelen verse afectados en una lesión de esguince de rodilla son el ligamento colateral medial (LCM) y el ligamento cruzado anterior (LCA). Un diagnóstico preciso de la gravedad de la lesión es crucial para determinar el tratamiento adecuado. En Clínica Osten contamos con una Unidad de rodilla y con la tecnología necesaria para poder identificar cualquier problema en el ligamento sobre la marcha. 

Causas  más comunes de esguinces de rodilla

Los esguinces de rodilla generalmente ocurren como resultado de ciertos movimientos o traumas, y las causas habituales incluyen:

1. Golpes contundentes: Una lesión directa en el lado de la rodilla, como un golpe o un impacto, puede estirar o desgarrar los ligamentos de la rodilla.
2. Cambios repentinos de dirección: Cuando se realiza un cambio rápido de dirección mientras se corre o se realiza una actividad deportiva, la rodilla puede torcerse y provocar un esguince.
3. Fuerza excesiva: La aplicación de una fuerza excesiva a la articulación de la rodilla, como una caída o un aterrizaje forzado, puede dañar los ligamentos.
4. Hiperextensión: Se da cuando la pierna se endereza más allá de su rango normal de movimiento.

En muchos casos, los esguinces de rodilla se producen mientras se realizan actividades deportivas, pero también pueden ocurrir en situaciones cotidianas, como resbalar y caer. La prevención de estas lesiones implica el fortalecimiento de los músculos de la rodilla y la práctica de técnicas adecuadas de aterrizaje y cambios de dirección.

Ante cualquier indicio de dolor en cualquier parte del cuerpo, en Clínica Osten encontrarás a tu disposición un equipo de profesionales dispuestos a brindarte el apoyo y ayuda con respecto a tu lesión y recuperación con el fin de que puedas volver a retomar tu vida con total normalidad en la mayor brevedad posible.