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28/12/2023
En esta ocasión en Clínica Osten vamos a explorar un dolor muy habitual conocido como hernia discal espinal o hernia discal, aquella que afecta a uno de los discos en la columna vertebral. Entre cada vértebra en la columna, hay una almohadilla, conocida como disco intervertebral.
La hernia discal, ese desplazamiento inesperado del núcleo pulposo del disco intervertebral hacia la raíz nerviosa, provoca un dolor intenso. Este malabarismo anatómico puede, en casos extremos, conducir al síndrome de cauda equina o cola de caballo, una urgencia quirúrgica que exige atención inmediata.
Mientras que muchos encuentran alivio a través de tratamientos conservadores, aproximadamente el 10% termina adentrándose en una intervención quirúrgica. En Clínica Osten, la tecnología de vanguardia se une a una profunda experiencia en técnicas quirúrgicas, con un enfoque especial en la cirugía mínimamente invasiva para una recuperación más rápida y eficiente. Además, mediante nuestro enfoque integral, el paciente se recupera mediante nuestros expertos en rehabilitación.
La aparición de la hernia discal es súbita, violenta y acompañada de una amalgama de síntomas. Desde el dolor agudo de la ruptura discal, hasta los efectos provocados por la presión de la hernia en la médula o los nervios, esta condición no deja piedra sin remover.
La ciática, con el dolor que irradia hacia la extremidad inferior, es la protagonista indiscutible. La distribución del dolor varía según la raíz nerviosa afectada, y los síntomas se manifiestan en diversas formas: mayor dolor al toser y al sentarse, hormigueo persistente, pérdida de fuerza en la pierna e incluso, aunque raramente, incontinencia urinaria.
La hernia discal lumbar no discrimina por edad, pero tiene una predilección por atormentar a aquellos entre 30 y 50 años. Esto no solo es un desafío médico, sino que también presenta un dilema económico significativo al afectar a aquellos en plena actividad laboral.
El pronóstico, en manos profesionales, es alentador. Con indicaciones precisas y ejecución cuidadosa de la cirugía discal, las tasas de éxito superan el 85-90%. En Clínica Osten somos expertos en el tratamiento de hernias discales, comprendiendo que, en el ámbito quirúrgico, es más probable que mejore el dolor irradiado a la extremidad inferior que el dolor lumbar en sí.
La cirugía busca liberar la raíz nerviosa comprimida, responsable de la sintomatología. La extirpación de la hernia, a menudo combinada con la resección de parte del disco para reducir la posibilidad de recurrencia, es una estrategia muy efectiva. Este procedimiento puede realizarse con o sin microscopio, y con incisiones que varían de 2 a 6 cm, ofreciendo opciones como la discectomía normal, mini o microscópica.
En algunos casos, la vía percutánea, asistida por endoscopios, presenta resultados comparables. La hospitalización postoperatoria varía de uno a tres días, seguido de un período de reposo relativo antes de embarcarse en ejercicios de rehabilitación.
Si sufres los dolorosos síntomas de la hernia discal, en Clínica Osten abrazamos la visión de una recuperación efectiva y una vida sin problemas en el lumbago. Pide cita con nuestros especialistas de la unidad de columna en este enlace.
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